Table of Contents
ToggleLas plumas que componen a las aves están compuestas de diferentes tipos, las cuales cumplen funciones diferentes y específicas. Las plumas principales son:
– Plumas de vuelo: las podemos encontrar en las alas y en la cola, son esenciales para que puedan volar, rígidas y resistentes.
– Plumas de contorno: estas plumas les cubren todo el cuerpo y hacen que su forma sea aerodinámica.
– Plumón: este tipo de plumas son suaves y esponjosas, suelen encontrarse debajo del plumaje de contorno y la función de este tipo de plumas es mantener la temperatura de su cuerpo.
Sus plumas están compuestas por la misma sustancia de la que están formadas nuestras uñas y cabello, denominada queratina.
Además, se sitúan de tal forma que aseguran impermeabilidad y protegen al ave de elementos físicos.
Otra de sus curiosidades es que, el color y diseño de su plumaje varían entre especies, utilizándolas para camuflarse, cortejarse e identificarse entre otros miembros de su misma especie.
¿Qué es bueno para el plumaje de las aves?
El modo en que se encuentran las plumas de las aves refleja la salud que tienen en general. Para mantenerlas en buenas condiciones debemos tener en cuenta los siguientes cuidados:
– Una alimentación balanceada: deberemos suministrar una dieta rica en proteínas, vitaminas y minerales, para asegurarnos de un óptimo desarrollo y mantenimiento de su plumaje.
– Baños regulares: las aves necesitan ser limpiadas con agua para mantener sus plumas limpias y flexibles.
– Ambiente adecuado: es importante que evitemos el estrés y que el espacio donde se encuentren esté limpio y seguro.
– Control de parásitos: los ácaros, por ejemplo, pueden dañar su plumaje, es por ello, que será de gran importancia hacer una revisión de las plumas y consultar al veterinario si se considera necesario.
¿Cuándo cambian de plumaje las aves?
En primer lugar, el cambio de plumaje es conocido en las aves como muda, es un proceso natural que ocurre en todas las aves, este proceso consiste en cambiar sus plumas viejas y dañadas por las nuevas.
– Frecuencia: la mayor parte de las aves mudan una vez al año, aunque hay especies que lo hacen de manera más frecuente.
– Duración: este proceso puede durar desde unas semanas hasta muchos meses.
– Factores ambientales: la muda suele estar influenciada por la estación del año, la luz y las necesidades biológicas del ave.
Cuando las aves están cambiando su plumaje requieren de más cuidado y de un cambio en la dieta, suministrándole alimentos ricos en proteínas para ayudarles en la regeneración de sus plumas.